Gomen ne Seishun (ごめんね青春!) , que podría traducirse como ‘perdona, juventud’, es un divertido dorama de instituto protagonizado por Nishikido Ryo, que formó parte del grupo idol Kanjani 8, y Mitsushima Hikari.
El dorama parte de una idea totalmente absurda y alocada llevada al extremo, para conseguir ahondar en las relaciones personales tanto de los adultos como de los jóvenes estudiantes de instituto.
Asimismo, toca muchos temas importantes como el matrimonio y la infidelidad, el dolor por la muerte de un ser querido, la amistad o las dudas sobre la sexualidad en la adolescencia y la aceptación con naturalidad de la diferencia.
Nos situamos en Shizuoka, donde se encuentran dos institutos, uno al lado del otro, totalmente diferentes y enfrentados entre sí desde que hace algunos años sucediera algo que los apartaría definitivamente el uno del otro.
Por un lado tenemos el instituto Tonkō, exclusivamente masculino y budista en el que trabaja Hara Heisuke (interpretado por Nishikido Ryo) un profesor de 31 años simpático y popular que se siente responsable de un incidente ocurrido en el pasado y que le tiene atado, en cierta manera, al instituto; por el otro, tenemos el instituto Sanjo, un instituto católico femenino en el que trabaja Hachiya Risa (interpretada por Mitsushima Hikari), una profesora estricta y disciplinada, aunque amable con sus estudiantes.
A pesar de sus rivalidades, ambos institutos se ven forzados a trabajar juntos en vistas de una fusión de los institutos para poder seguir funcionando en el próximo curso, debido a la disminución en el número de estudiantes y a la preocupante situación del instituto católico.
Es por ello que se decide hacer una prueba y mezclar los estudiantes de último curso, de manera que la mitad de las chicas pasa a estudiar en el instituto budista y la mitad de los chicos pasa a estudiar en el instituto católico.
A partir de ahí se suceden mil y una historias divertidas porque si bien los chicos del instituto budista masculino son, a priori, bastante alocados y malos estudiantes y las chicas del instituto católico femenino, muy disciplinadas e inteligentes, en la práctica nada será lo que parece y por ello ambos grupos vivirán situaciones extremadamente divertidas.
Con el paso del tiempo y con un objetivo en común, hacer realidad el antiguo festival cultural conjunto de ambos institutos, las relaciones personales se irán haciendo más profundas y se crearán auténticos lazos de amistad entre grupos, a priori, totalmente antagónicos.
La trama principal se ve apoyada con diferentes subtramas entre divertidas y tragicómicas, como especialmente la que nos lleva al pasado y nos muestra cómo la relación entre Tsutaya Satoshi (interpretado por Nagayama Kento), un estudiante del instituto de chicos y Hachiya Yuko (interpretada por Haru), una estudiante del instituto de las chicas es la responsable de las malas relaciones entre ambos institutos en la actualidad y de la pesada responsabilidad que lleva Keisuke sobre sus espaldas.
Además, hay otras tramas divertidas como las que relacionan la enfermera del instituto masculino (interpretada por Sakai Maki) con el hermano de Keisuke (interpretado por Enari Kazuki), la aparición en forma de Kannon de la difunta madre de Keisuke (interpretada por Aiko Morishita) o todas las historias personales de los estudiantes de ambos institutos.
A los pocos minutos de que empezara el dorama, nos miramos perplejos: ¿qué era eso que estábamos viendo? La premisa era tan absurda y estaba tan llevada al extremo que estábamos totalmente descolocados. Pero adoptamos la «absurdez» del dorama como algo «normal» y continuamos viéndolo. Y os podemos asegurar que nos enganchó de principio a fin.
El dorama combina a la perfección momentos de historia loca con momentos de historia seria y trata, con belleza y profundidad, algunos temas complicados que pocas veces surgen en doramas de instituto japoneses. Por ejemplo, la forma en la que se trata la homosexualidad en la adolescencia es maravillosa. Quizá ésta es la clave del éxito, el saber combinar las tramas más divertidas con las tramas más serias o trágicas de manera que todo tenga sentido al final del capítulo.
Por criticar algún punto, podríamos decir que el final no nos terminó de convencer por un aspecto concreto que no podemos desvelar para no estropearos el visionado. En realidad, no es que no nos gustara, sino que nos hubiese gustado que el futuro de uno de los personajes fuera diferente, aunque si lo pensamos con calma, tiene su gracia cómo lo han desarrollado.
Quizá una de las cosas que más nos gustan de este tipo de doramas de instituto tan corales es que permite que despunten jóvenes cantantes/actores/modelos/idols como Shigeoka Daiki, Nagayama Kento, Triendl Reina, Suzuki Takayuki, Hisamatsu Ikumi, Morikawa Aoi o Ryusei Ryo, por mencionar algunos.
A Nishikido Ryo lo hemos visto en la durísima Last Friends, en la genial Zenkai Girl y en la horrorosa Papa wa aidoru! o Papadoru!, por mencionar algunas series, mientras que a Mitsushima Hikari la vimos en la segunda temporada de Bloody Monday o en Woman.
Del resto del elenco, destacamos a Namase Katsuhisa que ha salido en multitud de películas y doramas como Gokusen, Legal High o Strawberry Night.
Absurdo
Disfruta de esta serie.
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